El 19 de octubre se celebra el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, el cáncer que más afecta a mujeres, en su mayoría occidentales de entre 40 y 75 años, por delante de los de colon, recto, pulmón y estómago.

#súmatealrosa

hedonai se viste de rosa para apoyar en esta causa que requiere, como poco, atención. Atención para la visibilización de la enfermedad, para no dar cabida a un tabú que impida a los afectados y al resto de la sociedad hablar de posibles soluciones o métodos de reducción del riesgo a contraerlo. También para hacer crecerse a tantas mujeres que pasan por ello y para recordarles que se sale y que pueden hablarlo, que deben hacerlo; que hay muchas que ya no están pero más aún que sí.

Se estima que, aproximadamente, 1 de cada 8 mujeres lo sufren a lo largo de su vida; en cambio, el índice de supervivencia es cada día más alto. Desde la Asociación Española Contra el  Cáncer se advierte sobre los posibles factores de riesgo del cáncer de mama, como son aquellos hereditarios, de raza, sexo o edad. También factores evitables como hormonales (es importante evitar procedimientos como el tratamiento hormonal sustitutivo tras la menopausia), ambientales o los relacionados con tratamientos de fertilidad o dietéticos, etc. El cancer no se puede prevenir, sin embargo, sí que podemos detectarlo a tiempo y, teniendo en cuenta los factores anteriores, ayudar a reducir el riesgo a padecerlo. Además, es importante observar los cambios en el cuerpo que denoten la aparición de esta enfermedad.

La mejor lucha es una detección temprana

Aumentar la inversión en investigación y el número de voluntarios son dos grandes frentes a combatir por los que este día merece todo el apoyo.  El fin es llegar al punto en que artículos como este no sea necesarios. Un punto en el que haya avances médicos que conviertan el cáncer en una enfermedad que se supere en el 100% de los casos. Mientras tanto hay que seguir fomentando la investigación, ayudando, seguir concienciando, y luchar, por encima de todo.

Actualmente, en el 82,8% de los casos que se detectan en nuestro país no queda rastro de la enfermedad tras 5 años del tratamiento, y es gracias a toda la información que crece año tras año. El cáncer de mama puede llegar, pero mejor si nos adelantamos.