Hay muchos mitos acerca de la depilación láser en verano. Para conocer los cuidados, mitos y recomendaciones acerca de esta técnica de medicina estética te recomendamos leer este artículo.

Inevitablemente en los meses de verano se suele ir a la piscina, a la playa o se realiza ejercicio físico al aire libre, es decir, el grado de exposición solar aumenta en este período. Por ello hay que tener un cuidado especial sobre la piel, aunque los cuidados de prevención y protección deben realizarse durante todo el año.

¿Es posible realizar la depilación láser en verano?

La respuesta es que sí, es posible realizarse tratamientos de depilación láser en verano. Gracias al avance de la tecnología no existen impedimentos reales, independientemente del fototipo de piel de cada persona, aunque sí existen una serie de cuidados especiales y precauciones a tener en cuenta.

Recomendaciones para realizarse el láser en verano

  • En primer lugar, es conveniente no tomar el sol al menos 7 – 10 días días antes de la sesión y de forma posterior a la misma. Si se realiza ejercicio físico es recomendable no hacerlo justo antes de la sesión.
  • Cuando vamos a realizar una sesión de depilación láser hay que estar rasurado, no depilado con pinzas o cera (nunca por arrancamiento).
  • Utilizar cremas hidratantes y consumir agua para que la piel presente un correcto estado de hidratación mejorará los resultados.
  • Se pueden realizar suaves exfoliaciones de la piel en los días previos para mejorar la efectividad del tratamiento. De esta forma se eliminan células muertas y sobretodo, se evita que aparezca foliculitis o vellos enquistados.

Cuidados antes, durante y después del tratamiento de depilación láser

Este tratamiento no es ni peligroso ni doloroso, pero aun así es recomendable tomar precauciones. Algunos consejos para lucir unas piernas perfectas y sin vello durante todo el verano son:

Antes de la sesión

  • Rasurar la piel: es necesario que no se haya llevado a cabo una depilación con cera o pinzas durante los días previos a la sesión, pero en cambio sí se puede rasurar el vello. Esto sucede porque es necesario el tallo del pelo para que la energía se conduzca hasta su matriz, que es lo que se quiere destruir.
  • No usar productos que decoloren el vello ni cremas autobronceadoras al menos una semana antes.
  • Utilizar siempre protección solar.
  • Si la piel se ha quemado o está muy inflamada tras exposición solar es conveniente ponerse en contacto con el centro médico especializado para reagendar la sesión si fuera necesario.

Durante la sesión

No hay que preocuparse por nada, ya que el especialista se encarga de resolver cualquier tipo de duda que pueda surgir. Tampoco hay que temer que la sesión sea dolorosa. Hace algunos años sí era habitual sentir ciertas molestias, pero las tecnologías evolucionan y hoy día existen aparatos con los que apenas se perciben esas sensaciones.

En primer lugar el profesional analizará el vello y la tonalidad de la piel (fototipo), ya que en función de ello los parámetros a utilizar cambiarán. El vello rubio, por ejemplo, tiene una concentración de melanina menor, lo que hará que sea algo más complicado de eliminar.

Por otro lado realizará una serie de preguntas rutinarias sobre el consumo de medicamentos o pautas habituales de higiene previas a la sesión. Además, si encuentra lunares los tapará con un lápiz blanco. Posteriormente iniciará el tratamiento.

Después de la sesión

Tras una sesión la piel se torna algo sonrosada y se queda sin vello. Pero no es algo especial, puesto que cuando se realiza un tratamiento con cera caliente la zona también se queda así de sensible durante un par de horas.

Es importante que el especialista indique a cada paciente el producto más adecuado para utilizar en este momento. Generalmente se recomienda un producto con aloe vera y que sea regenerador, además de evitar un foco de humedad y calor sobre el área tratada, en tu centro te ofrecerán la crema postláser que es específica tras la sesión.

Es posible tomar el sol, pero en algunas personas la piel estará más sensible por lo que es necesario también utilizar protección solar y evitar piscinas y saunas el día del tratamiento.

Conclusiones de la depilación láser en verano

Para concluir es necesario también apuntar que este tratamiento requiere algún tiempo para ser realmente efectivo. El vello desaparece, sí, pero es muy difícil predecir el número de sesiones necesarias para que el pelo deje de ser una molestia para ti, ya que es algo extremadamente variable. El tiempo para comprobar su efectividad variará en función de aspectos como el fototipo, la zona o el grosor del vello.

Que no se pueda realizar la depilación láser durante la época de más calor es algo totalmente falso, al igual que los peelings en verano, que necesitan una serie de cuidados extras pero no está contraindicado.

Es un tratamiento que se puede llevar a cabo durante todo el año sin ningún tipo de inconveniente, sea cual sea el fototipo de piel de cada persona. Tan solo hay que asegurarse de utilizar un buen protector solar y seguir las indicaciones del médico especialista para antes y después de la sesión.