La intralipoterapia con Aqualyx consiste en la infiltración de desoxicolato de sodio con una aguja especial y con una técnica que hacen el tratamiento prácticamente indoloro.

Diseñado inicialmente para los retoques de las liposucciones, está indicado para la reducción no quirúrgica de la grasa localizada en cualquier zona que tenga al menos 1,5 centímetros de espesor. Puede inyectarse en abdomen, flancos, trocánteres, cara interna de las rodillas, papada, etc.

El único efecto secundario es la aparición de pequeños hematomas, además de las  molestias postratamiento como dolor, escozor o calor, que se atenúan bastante utilizando compresión (faja o medias, según la zona).

Dieta

Lo ideal es combinar el tratamiento con una dieta baja en grasa y con tratamientos de drenaje -idealmente ultrasonidos, presoterapia, etc-. De este modo, los resultados que se consiguen son realmente espectaculares.

Si te preocupa la grasa localizada, acude a tu centro Hedonai más cercano y estaremos encantados de hacer un diagnóstico personalizado según tus necesidades.