El silicio orgánico es la forma asimilable por nuestro organismo del elemento químico llamado silicio. Forma parte de los llamados oligoelementos, y es esencial para la formación de tejidos como huesos, cartílagos, uñas, piel, pelo y vasos sanguíneos.

Podemos encontrarlo en la naturaleza en manantiales, ríos y lagos, donde llega el silicio filtrado de forma natural en forma de silicatos. También está presente en innumerables alimentos como hortalizas, frutas y verduras, sobre todo de hoja verde. Los cereales integrales así como las patatas, las legumbres o las algas también tienen este componente. En principio, una alimentación variada, sana y rica aporta la cantidad de silicio que el cuerpo humano requiere. Sin embargo, las dietas actuales abundantes en productos refinados y procesados pueden provocar un déficit de este mineral con consecuencias para la salud.

Beneficios del silicio orgánico

Las propiedades del silicio orgánico se conocen desde la antigüedad, sin embargo, no fue hasta el año 1957 cuando pudo sintetizarse por el hombre.

¿Pero en qué favorece al organismo humano? Se sabe que es un elemento esencial en huesos, cerebro y vasos sanguíneos. Además ayuda a prevenir el envejecimiento de la piel, por lo que es ampliamente usado en la industria cosmética.

Podemos afirmar que este oligoelemento ayuda en la regulación del sistema inmunitario estando presente en la generación de anticuerpos y mejorando la inmunidad del organismo contra las infecciones.

El silicio orgánico favorece los siguientes procesos biológicos

  • Está presente en la síntesis de elastina y colágeno.
  • Ayuda a la piel a mantener su elasticidad y tersura, previniendo la flacidez y las arrugas prematuras.
  • Al ser un antioxidante protege contra los radicales libres ayudando a mantener la dermis joven.
  • Mantiene la flexibilidad en los huesos y las articulaciones.
  • Colabora en la asimilación de otros componentes minerales esenciales para el organismo como el magnesio, el calcio y el fósforo.
  • Mejora la recuperación de músculos y tendones cuando se ha sufrido una lesión.
  • Es un elemento que actúa contra la hipertensión arterial porque protege las paredes de los vasos sanguíneos y reduce el colesterol.
  • Es un potente analgésico y cicatrizante, por lo que su uso tópico mejora la curación de llagas y heridas.
  • Tiene un papel primordial en el metabolismo general del organismo humano ya que interviene en la regeneración de las células dañadas mejorando el intercambio celular y restableciendo el balance iónico.

La carencia de silicio puede conducir a problemas de salud

Que sea un ingrediente que existe en multitud de alimentos no implica que no se pueda tener insuficiencia de este componente. Las consecuencias para la salud son:

  • Picor de la piel y eccemas.
  • Problemas de artritis y artrosis a medio plazo.
  • El silicio ayuda en la asimilación de otros minerales, evitando la correcta absorción del calcio, el magnesio y el fósforo así como a la síntesis de vitamina D.
  • Fragilidad de uñas y cabello.
  • El silicio está presente en la mebrana de los pulmones por lo que su déficit perjudica a su buen estado, siendo más propenso a infecciones, enfisemas, necrosis u otros problemas pulmonares.
  • Lesiones tanto de articulaciones como de tendones, músculos y huesos así como una peor recuperación de las mismas.
  • Aparición de forúnculos, fístulas y abscesos.

Tratamientos en los que el silicio orgánico está prescrito

Al estar presente en multitud de alimentos, el silicio es un mineral que puede mantenerse en los niveles adecuados mediante la dieta, sin embargo, existen situaciones carenciales y problemas de salud en los que el mineral puede jugar un papel fundamental en la mejora.

Se puede tomar de diferentes formas:

  1. Por vía oral mediante comprimidos o bebible en ampollas como suplemento. Cuando se plantea como suplemento alimenticio la dosis recomendada diaria es de 25 – 30 mg de silicio al día. Pero se recomienda que su aporte sea bajo control médico para evitar excesos innecesarios.
  2. En unciones aplicadas en las zonas afectadas. Para regenerar piel dañada por eccemas o mejorar la cicatrización, por lo que es un ingrediente indispensable en tratamientos para eliminar estrías.
  3. Mediante vaporización rociando la zona perjudicada.
  4. En gel, que se aplica sobre la piel y posteriormente se masajea para mejorar su absorción.
  5. En cremas que aportan silicio orgánico, regenerando la dermis, mejorando su flexibilidad y ayudando a la generación de colágeno. Pueden combinarse de manera puntual con cremas habituales para aportar este oligoelemento.

Contraindicaciones del silicio

A pesar de sus beneficios existen contraindicaciones que se deben tener en cuenta como son:

  • En caso de tener diabetes se ha de tener en cuenta que este oligoelemento puede disminuir los niveles de azúcar en sangre. Por tanto los suplementos deben estar siempre bajo prescripción médica.
  • Al tener un efecto diurético no se aconseja utilizarlo a la vez con fármacos diuréticos. La cola de caballo es una planta medicinal diurética por su alto contenido en silicio orgánico.
  • Si se toman suplementos para combatir la acidez se debe controlar su consumo ya que a largo plazo puede provocar la formación de cálculos.
  • Nunca exponerse a su forma inorgánica ya que es tóxico, sobre todo, de manera inhalada.

Como conclusión podemos decir que el silicio orgánico es un oligoelemento esencial para las funciones orgánicas relacionadas con el mantenimiento de los tejidos como huesos, músculos, cartílagos, articulaciones, piel, cabello y uñas. Su uso tópico en cremas y geles se usa para mejorar su elasticidad,  así como mejorar su tono, disminuir y eliminar arrugas o prevenir el envejecimiento prematuro.