La rinoplastia ha sido, durante años, una de las cirugías más demandadas en España para retocar la forma de la nariz y corregir sus imperfecciones. Sin embargo, no es la única cirugía que modifica el aspecto de esta parte del rostro. ¿Qué es la rinoseptoplastia? Esta intervención quirúrgica se realiza en otros casos diferentes y no solo para tratar problemas estéticos de la nariz. Veamos en profundidad de qué se trata.

¿Qué es la rinoseptoplastia y cuándo debe hacerse?

Por un lado, el concepto rinoplastia comprende modificar el aspecto que deforma la nariz y resecar la gibas nasales o afinar su punta. Por su parte, la septoplastia repara la permeabilidad de la nariz para evitar las obstrucciones en las fosas nasales.
Una intervención única de septoplastia trabaja exclusivamente en el plano funcional, mientras que la rinoseptoplastia comprende el aspecto funcional y estético. Lo mismo ocurre con la rinoplastia, cuya gran diferencia es que no se toca el tabique en la intervención, cosa que sí ocurre en la rinoseptoplastia.

¿Cuáles son algunas de las causas que podrían llevarnos a pensar en la rinoseptoplastia para mejorar la estética de la nariz y algunas de sus funciones?

  • Obstrucción nasal. Cuando notamos que nos cuesta respirar por la nariz y debemos abrir la boca para hacerlo es porque hay una obstrucción que impide el correcto flujo de aire.
  • Nariz tapada. No llega a ser una obstrucción, sino tal vez un estrechamiento excesivo de la zona.
  • Ronquidos y alergias.
  • Cefaleas. Muchas de las cefaleas que sufrimos son provocadas por daños en la nariz.
  • Deformación de la nariz. Esta puede afectar tanto al aspecto estético de la nariz como a su función.

Cuando se dan alguno o varios de estos casos, la rinoseptoplastia puede ser la solución definitiva. El doctor determinará si es así basándose en si se dan algunas de estas causas:

  • Se necesita cartílago o hueso del tabique como injerto.
  • Si la nariz está torcida por el eje y no afecta solo a nivel estético, sino también funcional.
  • Si una deformidad en el tabique nasal produce una obstrucción (aunque el médico tendrá que determinar si los orificios, los cartílagos de la punta y el dorso o la válvula interna también tienen que ver con un mal funcionamiento de la función respiratoria).

Diferencias entre rinoplastia, rinoseptoplastia y rinomodelación

Estos tres conceptos pueden resultar muy similares, por lo que vamos a desgranar cuáles son las diferencias principales entre estos tres procedimientos quirúrgicos.

Rinoplastia

La rinoplastia consiste en una operación quirúrgica que se centra, sobre todo, en modelar la nariz para mejorar su forma, tanto a nivel estético como funcional. De este modo, la persona que se somete a una rinoplastia puede tener la nariz soñada, ya que es posible aumentar o reducir el tamaño, redondear o afinar la punta de la nariz o modificar su estructura para que tenga otra forma. También existe un tipo de rinoplastia secundaria que se hace con incisiones internas.

Rinomodelación

La rinomodelación es un tratamiento estético sin cirugía que modifica la forma de la nariz o corrige el tabique nasal a través de infiltraciones de ácido hialurónico capaces de moldear la zona. Al no tratarse de una cirugía, se pueden conseguir pequeños retoques, siempre y cuando sean para aumentar el tamaño de la nariz, pero nunca para reducirlo.

Rinoseptoplastia

La rinoseptoplastia es una operación quirúrgica que consigue cambiar el aspecto de la nariz, tanto en el plano estético como en el funcional, ya que también se ocupa de corregir alguna posible desviación del tabique nasal que pueda haber. Esta es la gran diferencia con la rinoplastia, que en ningún caso se ocupa de modificar el tabique nasal.
Por tanto, no se puede denominar tan solo una operación estética, sino que se aplica para mejorar la función respiratoria. Tratándose de cubrir varios problemas a la vez, queda claro que es una intervención más larga que las anteriores.

La diferencia fundamental entre rinoplastia y rinoseptoplastia es que en el primer caso no se opera el tabique. Dra. Esther Espinel, especialista en cirugía plástica.

Rinoseptoplastia recuperación

¿Cómo se realiza una rinoseptoplastia?

Dependiendo de qué tipo de desviación tiene el tabique nasal del paciente (leve, grave o muy grave), existen diferentes procedimientos a los que se puede recurrir en una rinoseptoplastia.

¿Y cómo se realiza? La duración será de entre una a tres horas, según la complejidad de las alteraciones que haya que corregir. Se tratará de esta manera:

Corrección de los cornetes nasales. Se corrigen estos según la obstrucción nasal del paciente. Se pueden cortar por completo o hacer una resección (lo que también se conoce como una liposucción del cornete). Existe una tercera opción que pasa por la cirugía por radiofrecuencia, achicando el cornete de manera paulatina a través de unas agujas calientes. En este último caso el tiempo de recuperación es mayor, pues se provoca una herida que debe cicatrizar.
Septoplastia. Se hace una incisión en la parte anterior del tabique para despegar la mucosa que lo recubre. De este modo quedan expuestos el hueso y el cartílago y se pueden corregir sus defectos, resecando el cartílago o modelando el hueso con un cincel.
Rinoplastia. Se puede hacer con nariz abierta o cerrada, con la diferencia de que la incisión será fuera o dentro dependiendo del tipo de operación elegida.

El tiempo de recuperación de una rinoseptoplastia no es largo, aunque los resultados de esta intervención quirúrgica no se verán hasta los seis meses. Para que la nariz no pierda la forma se dejan unos tubos de silicona y luego se coloca una tela sobre el dorso para reducir el edema. Más tarde, deben realizarse masajes y curaciones.